En el barrio “San Vicente” de Calvas, Ecuador, se encuentra una pequeña capilla que alberga una figura muy especial: el Niño “Churro”. Esta figura, que representa a un niño Jesús con cabello rizado, es considerada un santo popular por los habitantes de Calvas. Los habitantes del barrio comenzaron a buscar al niño, pero no pudieron encontrarlo.

Finalmente, una mujer afirmó haber visto al niño en la capilla del barrio. La mujer dijo que el niño le había pedido que le construyeran una capilla en su honor. Los habitantes del barrio cumplieron el deseo del niño y construyeron la capilla. Desde entonces, el Niño “Churro” es considerado un santo popular y se le atribuyen muchos milagros. Cada año, el 14 de enero, se celebra la serenata al Niño “Churro”. Este evento reúne a cientos de personas, entre vecinos del barrio, autoridades locales y turistas.

La serenata comienza con la presentación de un grupo de danzantes tradicionales de la
provincia de Loja. Posteriormente, se realiza una misa en honor al Niño “Churro”.
Al finalizar la misa, se da inicio a la fiesta popular, que incluye música, baile y comida
típica. Los asistentes disfrutan de una velada llena de alegría y devoción.
La serenata al Niño “Churro” es una tradición que se ha mantenido viva por
generaciones. Es un evento que reúne a la comunidad y que celebra la fe y la cultura de
Calvas.
El Niño “Churro” como símbolo de la fe y la tradición, es un símbolo importante para la comunidad de Calvas. Representa la fe y la tradición de un pueblo que ha conservado sus costumbres a lo largo de los años.
La serenata al Niño “Churro” es una expresión de esta fe y tradición. Es un evento que
reúne a la comunidad y que celebra sus valores más importantes