Blog Detail

Hoy en la parroquia San Sebastián, se realizó la eucaristía de posesión como nuevo párroco del Rvdo. P. Luis Marcelo Enríquez Mora, presidida por Mons. Walter Heras, obispo de la Diócesis de Loja, Mons. José Bolívar Sierra, sacerdotes pertenecientes al clero lojano, movimientos laicales, catequistas, grupos juveniles, familiares y el pueblo católico de fe, que acompañaron al presbítero en el inicio esta nueva misión pastoral.

Durante su homilía Monseñor se refirió al evangelio, en el que Dios presenta la resistencia de los pobladores de unas ciudades ante ello lanza unos lamentos por la dureza de sus corazones.

Por otra parte, enfatizó que el sacerdote tiene que hacer presente a Jesús en la vida de la Iglesia y predicar su palabra.

La misión del sacerdote al frente de una parroquia, es quien guía, acompaña, aconseja, camina de la mano de su pueblo, teniendo presente a Dios, tomando una frase del evangelio de hoy, en donde Jesús dice: “Quien a mí me escucha, escucha al enviado por Dios”, y su palabra debe ser trasmitida. El Pastor de la Iglesia lojana invitó a orar mucho por su nuevo párroco, y hacer de esta parroquia un semillero de nuevas vocaciones.

Por otra parte, enfatizó que el sacerdote tiene que hacer presente a Jesús en la vida de la Iglesia y predicar su palabra.

Durante la ceremonia el P. Luis Marcelo realizó su profesión de fe y el juramento de fidelidad. Posterior a ello, se dio lectura al acta de nombramiento, firmada por Mons. Walter Heras y el actual párroco.

Al finalizar la eucaristía, expresó su mensaje de gratitud al asumir esta nueva misión y el trabajo pastoral en dicha Parroquia que es muy significativa, donde realizó el sacramento de la confirmación, formó parte de un grupo juvenil, además colaboró en el grupo de catequesis y es ahí donde nació el llamado de Dios a la vida sacerdotal.

Añadió que, quiere ser sacerdote según el corazón de Cristo, se encomienda en las oraciones de los fieles que serán su soporte, pidiendo además la intercesión de la Virgen Santísima en su caminar.